Esta es una duda que se repite con frecuencia y la respuesta a esta pregunta tan común es: ¡SÍ! Aquí te contamos.
Eventualmente durante el embarazo, y debido a los cambios físicos y hormonales, podrás experimentar cambios en tu conducta que pueden incluir tristeza, ansiedad, ganas de llorar o hasta rabietas.
Ahora bien, estas sensaciones no tienen por qué darse durante todo el embarazo, ni siquiera por un mes consecutivo. Será en ese caso cuando debamos hablar de depresión perinatal y tomar las medidas pertinentes.
La depresión perinatal es un estado de tristeza, confusión y soledad en las mamitas que puede presentarse antes del parto o una vez que haya nacido el bebé.
Estos ataques de tristeza están también acompañados de síntomas como insomnio o, por el contrario, deseos de dormir todo el día. También suele haber apatía, falta de interés (incluso por la llegada del bebé), problemas de concentración, pérdida de apetito o nerviosismo.
¿CÓMO SE PUEDE COMBATIR ESA SENSACIÓN?
En primer lugar, debes saber que llorar no es algo necesariamente malo. Si se analiza con detenimiento, el llanto funge como un calmante natural que nos puede llevar a un estado de serenidad una vez que lo experimentamos.
Por lo tanto, si sientes ganas de llorar, no debes contener tu cuerpo. Al contrario, puedes dejarte llevar y desahogarte para luego sentirte tranquila.
TAMBIÉN PUEDES SEGUIR ESTOS CONSEJOS:
- Realiza ejercicio físico, que puede ser incluso pequeñas caminatas durante el día.
- Trata de dormir al menos 8 horas al día para que el cuerpo cuente con el descanso necesario.
- Evita leer noticias angustiantes, películas o programas de TV que puedan crear sensibilidad o nerviosismo.
- Lleva una dieta equilibrada para que las hormonas y el organismo trabajen de forma correcta.
De cualquier forma mamitas, para combatir los estados depresivos resulta fundamental que te rodees de familiares y amigos que te brinden su apoyo.
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